El calentamiento es indispensable para hacer cualquier actividad física. Se debe hacer siempre antes y no dejar mucho rato hasta que empecemos la actividad física.
Una de las principales funciones es que «lubricaremos» las articulaciones preparándolas para la actividad. Así estaríamos listos ya que vienen de un estado de reposo e inactividad como de estar sentados y relajados.
Otra de las funciones de un calentamiento es que evitaremos lesiones si se hace bien hecho.
Ganaremos amplitud y movilidad en nuestro cuerpo, así podremos realizar mejor los ejercicios. Esto no significa que ganaremos flexibilidad.
Otra de las funciones es aumentar la temperatura corporal. Debemos preparar al cuerpo para la sesión, así que lo recomendable es aumentar la temperatura en el calentamiento.
Depende del deporte y actividad que vayamos a realizar haremos un calentamiento más específico o más general.
Mi recomendación es que si vamos a hacer una sesión de atletismo, deberíamos hacer una movilidad articular, trotar un poco y hacer algún ejercicio de técnica de carrera. Lo mismo haríamos en natación o algún deporte parecido que tenga similitudes como los movimientos de estos deportes. La duración del calentamiento bastaría con 10-15 minutos antes de la práctica deportiva.
Por otro lado, si vamos a hacer una sesión de gimnasio, podríamos ir andando o en bicicleta si no está muy lejos, y ya nos serviría de subida de temperatura y movilidad. Sino, nos podríamos subir a la bicicleta de spinning, elíptica, cinta o remo, y estar 5 minutos para subir la temperatura corporal.
Una vez hemos hecho esto, movilizaríamos articulaciones que vayamos a mover en los ejercicios. Como calentamiento más específico haríamos 1 o 2 series con un peso muy ligero para preparar los músculos. Con una serie con poco peso bastaría ya que el músculo si está acostumbrado a levantar un peso más fuerte rápidamente nos adaptaremos a ese peso.